miércoles, 23 de julio de 2008

Chiquita Crocante

Ese fue el apodo que me puso Ahui cuando, en diciembre, vendí galletas. Había días en que estaba de 7a.m. a 3 o 4pm haciendo montones y montones de galletas y empacándolas lo mas bonito posible... de Canela, Cocoa/Azúcar Glass, Almendra, Coco, Nuez, Azúcar, Chocolate liquido...




A la fecha, hornear me parece un verdadero gusto. No solo es hacer galletitas o pasteles que saben ricos, es mas, mucho mas.

No se a cuantas personas les he enseñado a hacer galletas, o me ha ayudado a hacerlas, no se, me gusta compartir eso que me gusta tanto...

Observe, querido lector, el recipiente clásico de las galletas, desde que tengo memoria, ha existido en casa y era donde poníamos las galletas, que en ese entonces, solo eran de canelita...




Aquí, mi ultimo alumno, decorando sus galleticas! El picioso lo hizo todo, aunque resulto una nenita cuando se trato de sacar las charolas del horno, Ja, Ja!

En si, creo que convertiré en una tradición el regalar galletas en navidad... todo el mundo ama las galletas, no?... estrellas, lunas, cuadritos, rombos, círculos, muñecos de nieve, arboles de navidad, ositos... hasta Olga Breeskin (U Olga Brinski, pa' que me entienda) y Patricios Estrella...




La cocina, finalmente, es como un laboratorio, o donde yo hago mis conjuros, esperando que las galletas, al llegar a la boca a la cual están destinadas, les haga soltar un "Mmmm!" y sonrían... (las personas, no las galletas.)

Y me siento como mama orgullosa cuando alguien me dice "que ricas estaban tus galletas!" y luego tratan de seguir explicándome lo ricas que son y no encuentran palabras, pero no hace falta, su cara lo dice todo...

Y hasta son bonitas, las condenadas. Son preciosas en la charola, en el platón, y entre los dedos de quien las probará.

Quizá también me gusta hacerlas, por que me recuerdan a mi mama, si, MAMA, que dice que el hornear, le da a la casa ese "calor de hogar"... Ella nos enseñó a hacer galletitas, pasteles, flanes, gelatinas, bufandas, etc, etc. Nos enseño a sobrevivir , nos enseño las cosas que nos gustan. Y claro, me enseñó a soñar.


He aquí la preciosidad que tengo por madre!

Tardes frías que se tornaban cálidas gracias a lo que ella nos preparaba. Días de invierno con bufanditas calientitas. Ropa limpia tibia de sol. Casa limpia a base de gusto y obstinación. Comida salada que devorar, y dulce para comer despacio.

A tal punto me gusta todo lo que me gusta, que pienso seguir haciéndolo. Y si algún día tengo hijos, intentaré darles ese "calor de hogar" que yo tuve y agradezco, para llenarles los recuerdos de tardes frías, con un tibio olor a galletas...


Por lo pronto, soy feliz al terminar de hornear, sabiendo de antemano que mis 2 monstruos come-galletas, harán unas caras hermosas al comer cada galleta!




3 comentarios:

  1. YO SOY EL TERCER MONSTRUO COME GALLETAS!!!!!!!!!!!!!!! PORFAVOR NO ME EXCLUYAS DE ESA LISTA PRIVILEGIADA....Y POR CIERTO, DESPUES DE LEER ESTE BLOG, YA QUIERO TAMBIEN SUMARME A LA LISTA DE ALUMNOS!!!!!!!!!!!!!!! PLEASE!!!!!!!!!!!!

    ATTE. LILIBETH :P

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  2. Todo el mundo ama las galletas, jajaja

    falso !!

    Bueno a casi todas las galletas.

    ¿me enseñas?

    No es que me queje pero me da flojerita escribir la palabra de verificación.

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  3. Te falto una foto de Erick haciendo galletas, recuerdo que ni su mamá lo creía... hay que buscar alguna.

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Y aqui es donde yo opino!